Iniciado por
José Carlos Sires
Hombre, para hacer ese estudio bien habría que partir de dos cruces de individuos puros sin riñas, como es el caso de tu criadero, ejemplares en los que en varias generaciones no se ha dado esta expresión, y otros ejemplares puros de riñas, ejemplares que lleven este factor en varias generaciones. Cruzamos macho puro sin riñas con hembra pura con riña y el otro cruce al revés. Deberíamos de tener nodrizas y las hembras objeto de los experimentos dedicarlas sólo a poner. Lo ideal sería seleccionar líneas cuya prolificidad sea buena. Con este método podríamos sacar varias puestas a cada una de las dos hembras y armar varios voladeros, se le pueden sacar hasta 5 y 6 puestas sin agotarlas mientras no críen y se les deje descansar los trece días de incubación tras cada puesta. Creo que así podríamos arrojar luz sobre este asunto. Dime que estoy loco, Pepe. ¿Habrá alguien que haya hecho algo parecido a ésto?