Iniciado por
susoso
Por decirlo de alguna manera, el mundo del silvestrismo vive una situación que raya con los paranormal, por no decir que los que legislan parecen intelectualmente anormales (conste que digo "parecen", no que los califique como tales, no sea que encima me caiga un un paquete por injurias). En primer lugar, las competencias en materia medioambiental están totalmente transferidas a las comunidades autónimas y consiguientemente cada una legisla según sus criterios, es decir, un burócrata sentado en una oficina que lo máxímo que conoce de biología y ornitología es algún reportaje que hipotéticamente pudo haber visto algún día en la 2ª cadena; si ya sé, seguramente estará asesorado por un competente equipo de licenciados en biología que casualmente son los mismos que le pasan la ITV a los renos del trineo de Papá Noel.
En las comunidadees donde está autorizada la captura, se suministra a las sociedades silvestristas un cupo de anillas (anillas especiales, nada que ver con las anillas oficiales de criador nacional) que habilitan para la captura de un número limitado de machos destinados a la aducación y los ancestrales consursos de canto silvestre, por supuesto, no se pueden capturar hembras.
Ahora viene la segunda parte, en pura teoría, para la tenencia de un ave de fauna europuea, su anilla debe ser totalmente "trazable", es decir, debe poder hacerse un seguimiento con datos que contengan toda la información sobre los progenitores con la filiación completa de sus propietarios. Quiere esto decir que si se diera el caso tendríamos que poder tirar de la manta, anilla tras anilla, hasta llegar a la "prima mater", esa primera jilguera de la que proviene toda la subsiguiente prole.
Con la legislación actual en la mano:
-¿Hay algún jilguero "legal" en este país?