Pues bien, la vecina me dejo por un rato a su hijo y este de 4 años, no ha tenido otra idea que irse donde los pipis, como los llama él, como le gustaban tanto pues lo deje un ratito mientras lavaba los bebederos y comederos de mis pajarillos, cuando volví, habia dejado escapar a tres jilgueros y cinco mosaicos . En ese momento me acorde de Herodes y de una frase que venia al pelo....dejar que el niño se acerque a mi....ains!!!! la madre que lo parió. El todo feliz viendo como salian y yo con los sojos inyectaos en sangre, intentando guardar la compostura le dije, ven bonito, nos vamos con tu piiiiiii......madre.
Tengo un sofocón...pero bueno el crio fué feliz por un ratito.