En casa la primera semana de vida los tengo en una caja y eso ya me cuesta más de una discusión. Suerte que al final se enternece de verlos tan pequeños y afloja.
¡Lo que tienen que aguantar las pobres!
En casa la primera semana de vida los tengo en una caja y eso ya me cuesta más de una discusión. Suerte que al final se enternece de verlos tan pequeños y afloja.
¡Lo que tienen que aguantar las pobres!
Hola Francisco.
Ahí te pongo unas fotos de ayer a la hora de la siesta del "señorito" de la casa.
Joder que virgueria de pajaro, como has hecho para amansarlo, aunque yo tendria mas facil como dice Pedro , meter al perro en la jaula de los perdigones, je,je.
No era blanco. Es un pollo normalito y se ha quedado encanijado debido a que se pasa el día sobeteado por mi mujer. Lo coge y le da besos y cuando le dice, "Felipe, ven que mamá te dé besitos", se sube donde esté y le pone la pechuga en la boca.
Cuando se lo digo yo, sale a correr y se esconde debajo de la cama para que no lo coja.
Es un convenido.
Hola Francisco.
Lo recogí de una incubadora con 3-4 horas de vida, pues nació con una luxación de cadera y querían tirarlo a los arcenes de la autovía.
Lo llevé a casa y mi mujer se enamoró de él, cuando con 2 días de vida, y con sus patitas todavía débiles, se puso a bañarse en arena cuando lo puse al sol.
Le corregí la luxación con unas bridas pequeñas de las de electricista y un pequeño mosquetón de pesca, y con 4 o 5 dias, ya se ponía de pié.
Antes, con la pancilla en el suelo, se desplazaba remando con las alillas.
Lo de amansarse,es cosa de mi señora, que desde que llegó, se lo metía debajo de mano para que estuviese calentito y se pasaba horas y horas con él, y así hasta hoy, que estando ella en casa no existe nadie más.
La verdad es que es una pasada estar comiendo y que se suba a la mesa a robarte un trozo de verdura, de fruta o de lo que en ese momento le apetezca. Se pasa el día suelto por casa y lo que más le gusta es usar el ordenador. Se ve que como sigue siendo una "gallina", el hecho de picotear las teclas, como hacemos nosotros, le gusta.
Muchas veces lo he pillado trasteando con el ordenador abierto y alucinando cuando le da a las teclas y cambia la pantalla.
Caga donde se le antoja, pero no ensucia mucho, y como dice mi señora..."¿qué son dos caquitas comparadas con el amor de mi pollo?"
Si tienes oportunidad, separa uno y conviértelo en mascota.
Yo los tuve hace años pero en terreros ( no me gustaron nunca las jaulas de reclamo ) y me conformaba con que saliesen de la jaula y comiesen de mi mano.
Pero es que este se sienta contigo a ver la tele o echarse una siesta.
Son inteligentísimos, curiosos y muy cariñosos.
Merece la pena y es una mascota distinta.
Un saludo
¡Ostia, que curioso pájaro!. En las fotos del sofá parece más que se haya caído del piso de arriba más que que esté sesteando.
Felicidades