Hola Enrique: También comparto todo eso que dices. Yo tengo muy pocas hembras azules, apenas dos en veinte parejas y creo que es bueno trabajar con los dos tipos de hembras, feomelánicas y azules. Sólo resaltaba las virtudes de esa hembra en concreto lo que no quiere decir que trabajemos con el azul como mejor vía para conseguir intensos. Así que, como tú,empleo y me declino más por las feomelánicas desde siempre lo que no quita para que tenga algo en factor azul. Un buen intenso de lipocromo brillante puede venirnos de una hembra feo achocolatada, sin apenas lipocromo, mas bien el culpable será el macho intenso que acoplemos porque ya sabemos que el nevado no es portador de intenso. Influirá también la herencia de sus ascendientes y puede que en ese camino haya habido azul, que es el que limpia de feomelanina a ese intenso. Acordémonos de esos intensos que nos saltan, por contra, sin brillo, de lipocromo mate, que no tienen nada que ver con esos intensos brillantes. Nos hace pensar, ¿No habrá comido colorante?, ¿habrá tenido un problema de asimilación?, ¿estará ya lejos del cardenalito?, yo creo que es la feomelanina dispersa la responsable de ese tono mate lipocrómico. Pero digo todo esto de forma autodidacta. Habrá gente mucho mejor preparada que yo y sería interesante que lo corroborara o lo echara por tierra.
Sobre el diseño roto creo que también influirá la herencia de las antiguas lineas de canarios anglosajones, no hace muchos años que se ha generalizado ver linea ancha en concurso. Así que no sólo creo que tenga que ver el factor azul. Pero no estoy seguro al cien por cien, sólo es mi hipótesis.
Y en cuanto a lo que dices de los nevados es que tenemos otro poblema los criadores de negro-rojo. Mientras no separen intensos de nevados en concurso, no seleccionaremos nevados con verdadero interés y por tanto no los conseguiremos como manda el estandar. Saludos y que siga el debate.