Lo siento mucho Luis.
Hace poco más de una año a mí me pasó algo parecido con un alcaudón. Yo crío en jaulones en una terraza y tuve que cubrirla con una malla de un material imputrescible e irrompible, salvo con mucha tensión. Te pongo el antes y el después. Desde entonces, lógicamente no me ha pasado más; pero lo más importante también es la tranquilidad. Si no solucionas el tema, no sólo es que pueda volver a ocurrir, como es lógico, sino que tú tampoco estarás nunca tranquilo y esa sensación es jodida a la hora de criar pájaros.
¡Ánimo!